Cuando pensamos en vehículos eléctricos (EVs), a menudo visualizamos una visión futurista de movilidad sostenible y eficiente. Sin embargo, para los profesionales de Aseguramiento de Calidad del Proveedor (SQA) y de Ingeniería de Calidad del Proveedor (SQE), esta visión desde su perspectiva representa toda una serie de retos.
Iniciando por el desafío constante ante la creciente diversidad de modelos de EVs, todo vehículo independientemente de sus variables requiere de los estándares más altos de calidad, sin importar cuán diversa sea su gama de modelos. En un mercado en constante cambio, la inspección de la calidad no se limita.
Cada nuevo modelo trae consigo innovaciones únicas, diseños revolucionarios y enfoques tecnológicos que difieren de sus predecesores generalmente, como en: